Seguro que más de una vez «has estado a dieta» «haciendo las cosas bien» te has subido a la bascula y no habías perdido ni un gramo o incluso habías puesto peso, pues déjame decirte que es algo normal.
El peso que marca la báscula no es más que el reflejo de muchas variables, glucógeno almacenado, agua retenida, el transito intestinal, etc.
Podemos ver oscilaciones de peso hasta por meter cierto tipo de verduras con más o menos aporte de fibra, por este motivo no ver en la báscula el numero que teníamos en mente no debe desanimarnos, tenemos que aprender a interpretarlo.
La perdida de grasa que se genera cuando estamos haciendo una buena selección de alimentos y manteniendo una actividad física con regularidad puede ser de 0,3 – 0,5% a la semana, ese peso puede verse superado por una oscilación de peso de agua retenida, por lo que ver mas peso no significa que no estemos perdiendo grasa, o que no estemos haciendo las cosas bien.
Hay personas que prefieren no pesarse por que esa situación les genera cierta presión y es comprensible. Pero si tenemos conocimiento de lo que ocurre en nuestro cuerpo y sabemos que esas oscilaciones no son mas que el reflejo de las variables de las que antes hemos hablado no tiene por que suponernos una carga.
Te pongo un ejemplo, tenía una atleta que se pesaba a diario y veía que cuando hacia su cena favorita que era un «poke» de arroz con gambas al día siguiente siempre pesaba más, por lo que dejó de hacer su cena favorita y optaba por opciones sin carbohidratos solo para ver en la báscula un poco menos de peso aunque en las revisiones todo iba genial y el ritmo de perdida de grasa era muy bueno y mantenía bien su rendimiento el echo de no ver esa bajada continua la cabreaba.
al cabo de unas semanas la situación cambió, aumentó muchísimo su ansiedad por las cosas dulces, su rendimiento se veía comprometido a mediados de semana y ya no aguantaba sin picotear… ¿que pasaba? que las prisas estaban saboteando su plan.
Empezó a mirar más al medio plazo, volvió a introducir sus comidas favoritas, volvió a recuperar su rendimiento y puedo decirte que tras 18 meses de trabajo ahora no tiene restricciones, disfruta de cada comida, está mil veces mas fuerte y os chivar que consiguió perder un 16% de grasa, aunque esto no es lo más importante.
Lo que realmente importa es que cuando damos el paso de cuidarnos tenemos que entender que el proceso será largo, que la salud no solo está en unos rangos y que el equilibrio en todo esto es fundamental, recuerda:
Hazlo facil, hazlo a diario, hazlo duradero.
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